Tenía Vierge la oportunidad en esta segunda carrera de continuar su particular escalada hacia el título, o por lo menos para poner en problemas la coronación de Edgar Pons, pero el líder fue capaz de parar el golpe de la primera carrera y meter cinco puntos más a su perseguidor.

Al apagarse el semáforo Vierge volvió a ser el más listo de todos y logró la primera plaza, aunque Marini le arrebató la posición de privilegio y los dos trataron de separase de Techer, que circulaba tercero al preceder a Edgar Pons.
A pesar de haber conseguido algo de ventaja, la perdieron inmediatamente cuando entraron en lucha por la primera plaza. Esta circunstancia la aprovechó Pons, que había dado buena cuenta de Techer. El francés pedía ritmo y también era superado por Granado. El brasileño había demostrado ritmo en la primera carrera y fue capaz de mantenerse en el grupo de las dos motos del Pons Racing, y con la esperanza que le acercasen a un Xavi Vierge que había conseguido meter un segundo y medio en el crono con el segundo grupo.
A mitad de carrera, quizá por la falta de experiencia, Marini empezó a ceder y no pudo seguir el ritmo de Edgar, que se lanzó a por Vierge, así que se quedó de nuevo un trío luchando por el último escalón del podio que quedaba disponible.
Ya a tres vueltas del final, justo antes de una zona con bandera amarilla, Edgar superó a Xavi para imponer un altísimo ritmo que le dio la tranquilidad total en la carrera, y que le permitió devolverle cinco de los nueve puntos que perdió en la primera carrera del día. En la última curva de la última vuelta Vierge trató de hacer un último movimiento sobre Pons, y la frenada que hizo fue de escándalo, apoteósica, aunque sin el resultado deseado por él.