En los 15 años que nos llevan desde el año 2.000 hasta el 2.015 los 16 títulos se han repartido entre Honda y Yamaha, exceptuando un título para Suzuki y otro para Ducati.
Precisamente en la temporada del año 2.000 se llevó el título Kenny Roberts, Jr. en un año lluvioso, y el conocido y todavía celebrado título de 2.007 de Casey Stoner. El resto de títulos se reparten entre Yamaha y Honda a partes iguales con 7 campeonatos para cada marca. A pesar de que haya habido equilibrio y una cierta alternancia entre los de los diapasones y los del ala dorada, es evidente que se adueñado del campeonato, expropiándolo al resto de marcas e incluso a la propia organización.
Sin embargo, conscientes de esa situación, Dorna empezó a trabajar para recuperar el campeonato y la competición. Además de las dos anécdotas de Suzuki y Ducati no ha habido competición posible más allá del binomio japonés.
Con este enfoque eran sólo 4 motos las que podían optar a la victoria de carreras y, por lo tanto, tener oportunidades de ganar el campeonato. Como las fábricas lo sabían eran muy cuidadosas escogiendo a los pilotos que fichaban, de hecho tenían a todo el mercado de pilotos a disposición para construir su futuro deportivo. Pero si cambiamos el enfoque al punto de vista de los pilotos, todos sabían que sólo se podía ser campeón en una de esas dos marcas, con nadie más.
Este extremo lo demostró uno de los pilotos considerado de “los 4 fantásticos”, un grupo que sólo ha sustituido a Stoner por Márquez, cuando Rossi dio el salto a Ducati pasando dos temporadas en el dique seco. No había vida fuera de Honda o Yamaha.
Ese paseo por el infierno de Rossi, sumado a los 8 vencedores distintos de la primera temporada de igualdad electrónica nos guían a unas preguntas que hasta ahora no parecían tener demasiada lógica plantearse.
La primera es preguntarse si ha subido el nivel de los pilotos. Se han estrenado en el peldaño más alto del podio Miller, Iannone, Crutchlow y Viñales ¿acaso es porque tienen algo diferente a lo que tenían Bautista, Bradl o Barberá? por citar sólo unos ejemplos.
Probablemente la respuesta nos lleve a que ellos están en una MotoGP sin tantas diferencias entre las motos como en épocas anteriores. Y eso nos lleva a una segunda pregunta:
Los 4 fantásticos ¿lo eran realmente por derecho propio?
Que no se malinterprete, porque está claro que además de tener la moto hay que llevarla de una manera que sólo unos pocos pueden hacerlo así que, si reformulamos la pregunta se podría enunciar lo siguiente: ¿Si Honda y Yamaha no hubiesen tenido motos tan superiores a las de las otras marcas, se habría acuñado el término de “los 4 fantásticos”?
No. Probablemente no.
Es una paradoja porque para saberlo vamos a tener que esperar, porque sólo extrapolando lo que va a pasar con un campeonato más igualado mecánicamente lo podremos saber. Y parece claro que si Dorna consigue hacer el campeonato más discutido, con Ducati, Suzuki y más marcas competitivas, costará mucho más ganar carreras y campeonatos.
Quizá no podamos volver a ver mitos con listas inacabables de títulos nunca más.
@MotorluNews