Seguramente a más de uno aún le tiemblan las piernas. La categoría pequeña del mundial ha demostrado una vez más el alto nivel de competitividad que existe entre los pilotos. Carrera de infarto, disputada hasta el último milímetro, emocionante, apasionante; imposible apartar la vista ni siquiera un segundo de la carrera. Aun así, faltan adjetivos que describan realmente lo que se ha vivido hoy en Moto3 en Mugello.
Tras una salida limpia, el “poleman” Jorge Martín (Del Conca Gresini Moto3), que salía 13º a causa de una sanción, realizaba una gran remontada y en la segunda vuelta luchaba por las posiciones de podio. Durante el primer tercio de carrera se formaba un grupo de hasta siete pilotos que cerraba el gaditano Marcos Ramírez (Platinum Bay Real Estate). Situación transitoria ya que solo unas vueltas más tarde el resto de pilotos de parrilla, que poco a poco iban cogiendo ritmo, se unieron al grupo cabecero, situación que se mantuvo hasta final de carrera. Tal era la igualdad de tiempos entre pilotos que la diferencia entre la cabeza y el último ha llegado a ser de 0,9s en alguna de las vueltas.
Ni siquiera el último giro decidió la carrera, sino que fue en los últimos metros. El italiano Andrea Migno (SKY Racing Team VR46) conseguía imponerse a su compatriota Fabio Di Giannantonio (Del Conca Gresini Moto3), que acabó segundo, y un gran Juanfran Guevara (RBA BOE Racing Team) pasaba en tercera posición logrando así su primer podio mundialista.
Aron Canet (Estrella Galicia 0,0), que acabó en quinto lugar, se hizo con el record del circuito marcando un gran 1:57.071s. En cuanto al resto de pilotos españoles, Joan Mir (Leopard Racing) acabó 7º, Ramírez 9º, Martín 15º y Herrera (AGR Team) 26ª. Albert Arenas (Aspar Mahindra Moto3) sufrió una caída en las últimas vueltas y tuvo que ser llevado al centro médico.
Así queda el mundial tras el Gran Premio d’Italia Oakley: 1. Mir (108p), 2. Canet (74p) y 3. Di Giannantonio (71p).
@PatriTrapero