Nada ha sido lo que se esperaba, después de unos entrenos en donde había dominado Marc Márquez con autoridad sobre Andrea Dovizioso y Maverick Viñales, nos hemos encontrado con una carrera en donde ha habido una lucha de poder a poder.
De nuevo en una pista reconocida como favorable para las características de Ducati, Márquez y su Honda han puesto en cuestión el reinado que ha conseguido mantener, in extremis, un Andrea Dovizioso que ha hecho un gran y agresivo movimiento en la última curva.
Fabio Quartararo ha sido la sorpresa, al subirse en el tercer peldaño del podio tras haber estado liderando la carrera en sus primeros compases. Para terminar encaramado a las tablas de la gloria, ha tenido que torcer el brazo a las dos Yamaha oficiales de Valentino Rossi y Maverick Viñales, a las que ha batido a base de ritmo.
Una pista especial, que ha mostrado la debilidad de los proyectos de Suzuki, con un sexto de Álex Rins, y de las motos italianas de Aprilia. Andrea Iannone ha terminado último, mientras que Aleix Espargaró ha sido antepenúltimo, consiguiendo dos puntos.
Esta diferencia de resultados respecto de los entrenamientos se han debido a las condiciones meteorológicas, que con la lluvia nocturna se ha retirado la goma del asfalto, además de una menor temperatura en pista al estar las nubes cubriendo los rayos del sol.
Una pista nueva. Mala elección y nueva estrategia
Tanto Andrea Dovizioso como Marc Márquez atribuyen a la diferente elección del neumático trasero. El de Ducati ha elegido el compuesto blando, mientras que el piloto de Honda ha equipado su moto con el neumático medio. En las primeras vueltas ha sentido que no tenía suficiente grip, mientras que Andrea Dovizioso ha visto que el de Cervera tenía spinning [rueda patinando al acelerar] y que iba a poder disputar la carrera.
Pasada la mitad de carrera y habiendo comprobado que podría disputar la victoria, Andrea Dovizioso ha pensado que tenía que debía diseñar una estrategia. Ha decidido que lo mejor era mantenerse en segunda posición, dadas las características de pilotaje de su rival. Explicaba que “Marc es uno que si va detrás puede frenar más tarde, meterse en el interior y así controlar la frenada [para forzar al otro piloto a cortar gas]”.
Eligió mantenerse en la retaguardia porque no tenía el ritmo suficiente para escaparse y así tratar de hacer un movimiento en la última parte de la carrera. No pudo hacerlo donde él quería intentarlo, así que ha tenido que intentarlo en la última parte del circuito. Ha podido hacer la penúltima curva y llegar con ventaja al último ángulo gracias a la mayor tracción que tenía.
Los dos pilotos han explicado que tuvieron un contacto en esa última curva, para Dovizioso esa ha sido la clave “él no me ha podido devolver el ataque por ese contacto, involuntario, aunque lo esperaba porque yo me he ido un poco largo”. Márquez ha dado su visión del incidente y comentó que “se me ha enganchado el protector de la leva en alguna parte de la moto de Dovizioso y me iba con él. Al final se ha roto y he podido parar la moto”, pero en ningún caso lo usó de excusa “no hay que quitarle ningún mérito a la carrera que ha hecho Dovizioso”.
Nuevo impulso para una mayor evolución
Tras la rueda de prensa oficial, Andrea Dovizioso ha tratado de enviar un mensaje positivo a su entorno “espero que esta victoria sirva para darnos ánimos renovados para seguir desarrollando la moto”. Algo que, de una forma menos amable dijo tras la carrera de Alemania, en el circuito de Sachsenring, y que llevaron a Gigi Dall’Igna a llamar a Jorge Lorenzo.
Cambia la forma de decirlo, pero no su mensaje, urgió a no perder de vista que “esta carrera ha sido un pulso con Marc, pero este tipo de carreras son pocas a lo largo del año”. El de Forlì no da por cerrado el campeonato, por más difícil que esté, “porque nunca sabes cuáles van a ser las evoluciones que van a llegar”, dijo sin perder la esperanza.
De todas formas, es evidente que las declaraciones de hoy, puestas en contexto con las anteriores demandas del ‘alfiere’ de Ducati, muestran que piensa que con la moto actual no pueden presentar batalla a Márquez y su Honda en otros circuitos. De ahí su contínua demanda de un mayor trabajo en el chasis que mejore la agilidad de la moto.
Las dos caras de Yamaha
También el cambio de pista ha sido la diferencia entre las tres Yamaha, que se han colocado tercera, cuarta y quinta, en manos de Fabio Quartararo, Valentino Rossi y Maverick Viñales. Mientras que el francés ha escogido el neumático trasero blando, al igual que Dovizioso, los dos pilotos de Yamaha oficiales han elegido el compuesto medio. Maverick Viñales ha dicho que “hemos escogido el neumático con el que hemos estado trabajando todo el fin de semana y que nos iba bien”, mientras que para Valentino Rossi ha sido una necesidad y aseguraba que él no podía utilizar la goma blanda.
El italiano asegura que algo se está moviendo en Yamaha, y que eso le deja un poso de optimismo, ya que ha podido mejorar la aceleración. Para Maverick Viñales sigue siendo un misterio por qué no consiguen hacer funcionar la moto cuando cambian las condiciones de pista y conseguir grip.
Resulta complejo comprender la diferencia de rendimiento de la moto de Fabio Quartararo con respecto a las demás Yamaha, ya que su motor comprende una reducción de potencia de 500 rpm. Aunque sabe que tampoco podría haber optado a más, porque los dos primeros estaban un paso por delante y él “no tengo experiencia con la gestión de los neumáticos y ha sido un final de carrera muy difícil”
Maverick Viñales ha llegado a alcanzar a Valentino Rossi, recuperándose de los incidentes de las dos primeras vueltas y que le hicieron caer hasta la séptima plaza, pero no ha podido intentar superarlo porque ya tenía el neumático destrozado “si hubiese intentado pasar a Valentino me hubiese ido largo y hubiese perdido la 5ª plaza con Rins. Me he defendido más que atacar”.
Falta de potencia y estabilidad en frenada
Quizá no sea un trazado atractivo, pero sí que maximiza las virtudes y los defectos de las motos. En esa segunda unidad, la de los defectos, está Suzuki. Una moto muy ágil, con gran paso por curva, pero que no tiene una gran velocidad punta ni una estabilidad en frenada suficiente como para compensar las carencias del motor.
Las frenadas excepcionalmente fuertes del circuito austríaco ponían en crisis al tren delantero y no podía parar la moto. Sobre el grip de la pista “ha sido algo que me ha dado igual, incluso ha sido positivo porque creo que con más calor habríamos sufrido”.
Algo similar ha pasado en Casa Aprilia, con sus dos pilotos en las tres últimas posiciones. Andrea Iannone ha cerrado la clasificación, mientras que Aleix Espargaró ha podido recoger los 2 puntos que deja la decimocuarta posición. Queda claro que en Aprilia se necesita algo cercano a una revolución.
Como muestra de la mejora que necesita Aprilia hay que mirar a KTM, que se ha podido resarcir del problema técnico de Pol Espargaró con la 8ª plaza de Miguel Oliveira, que ha entrado pegado a la Ducati de Pecco Bagnaia. Sin embargo, Johann Zarco vuelve a ser una decepción, acabando a más de 9 segundos del rookie portugués.
El aroma de un campeón es la madurez
Una carrera loca en Moto2, con múltiples caídas en la parte delantera de la carrera, han vuelto a dejar en bandeja para Álex Márquez un segundo puesto que para él es como una victoria.
Partió desde una alejada undécima posición, con menos ritmos que los pilotos de cabeza y Thomas Lüthi por delante de él, además de tener una pista que ha sido difícil de leer para todos. Ahí es donde ha sacado a pasear toda la experiencia que ha ido acumulando, aprovechando bien la salida y las primeras curvas para mantener a distancia de medio segundo al grupo delantero.
A partir de ahí se han sucedido las batallas, las caídas de Nagashima y de Vierge, que le han permitido integrarse en el segundo grupo mientras Brad Binder se escapaba de todos. No entrando en luchas estériles cuando le superaban y teniendo fortuna cuando impactaban otros, o incluso cuando ha tenido un contacto con Remy Gardner.
El incidente ha dejado al australiano sin la plaza de podio en que se encontraba, y sin poder terminar una buena carrera. Pero Márquez no se ha descentrado, y de la misma manera que no entró en peleas que le podían complicar la vida, tampoco hizo al inicio de carrera unas vueltas agónicas que le permitiesen una recuperación épica.
Con paciencia y sabiendo analizar cuál debía ser su carrera en cada momento, ha ampliado su diferencia con un Lüthi que fue de más a menos y sumando 10 puntos más a su colchón de seguridad que se pone ahora en 43 puntos. Pero no es la distancia, es la actitud lo que más le acerca al título.
Redención
Romano Fenati, que está en busca de una plaza en un equipo de Moto2, ha conseguido este fin de semana una parte de su redención a los ojos de aficionados y, sobre todo, equipos. No sólo se anotó la pole de la clasificatoria del sábado, sino que ha sabido llevarse de forma autoritaria la victoria en el Red Bull Ring.
Fenati se puso al mando en la vuelta 9 y ya no lo abandonó hasta pasar primero bajo la bandera ajedrezada. Fue capaz de establecer una distancia de un segundo con su compañero de equipo, que tuvo una buena batalla con John McPhee y un Celestino Vietti que llegó en las últimas vueltas. El de la VR46 Academy se quedó fuera del podio por milésimas.
Canet perdió el liderazgo del campeonato, pero sigue virtualmente empatado con Lorenzo Dalla Porta, que no ha hecho tampoco una carrera muy brillante. El italiano terminó 6º, mientras que el español cruzó la línea de llegada en 10ª posición.
@LucioLópezGP
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