Según informaba ayer noche gpone.com, parece que el test de Sepang será la prueba definitiva para decidir si la ‘rossa’ se inscribe al campeonato con las especificaciones “Factory” o bien, y esto es lo que escandalizaría a todos, con especificaciones “Open”. Además de abrir las dudas al respecto de los motivos, también están las consecuencias políticas ¿Mantendrían su posición en la asociación de constructores, la MSMA?
La llegada de Gigi Dall’Igna y los poderes que le han otorgado parece que empiezan a crear las primeras reacciones, tanto en la casa italiana como en el universo MotoGP, ya que el ingeniero está valorando de una forma seria el inscribirse como categoría “Open” en lugar de “Factory” tal y como venían haciendo hasta ahora.
Con la experiencia de Gigi con las Aprilia ART, que luchaban en casi cada carrera con las oficialísimas Ducati y dado el poco tiempo que tiene para trabajar y crear un concepto de moto desde una hoja en blanco, parece que está barajando de forma seria hacer que Ducati se presente como categoría “Open”. ¿Cuáles serían los motivos?
Aquí haremos una hipótesis con las ventajas que puede dar a su situación, pero si quieres ver todas las diferencias entre “Factory” y “Open” puedes verlo pinchando aquí.
¿Qué se persigue si se alistan como “Open”?
Al inscribirse en esta categoría podrán seguir desarrollando el motor, permitiendo así trabajar al equipo de ingenieros en la evolución y sobre todo en la adaptación al chasis que desarrollen. Además de tener 12 motores que podrán exprimir mucho más en vueltas que si tuviesen sólo los 5 de la categoría “Factory”.
Que además de tener SIETE motores más, los van a tener con un depósito de 24 litros y con unos neumáticos Bridgestone más blandos que los de la categoría “Factory”. Todo eso con el único peaje de lidiar con la ECU (Centralita Única), que por otra parte les encaja perfectamente porque así no han de dedicar tiempo y esfuerzo a ese campo y poder centrarse en la maquinaria.
Esto nos deja que si pueden llevar los motores más apretados de revoluciones, con un depósito que les permite mayor autonomía y por tanto mayor rendimiento de motor y con unos neumáticos que se estima que mejoran 0.6 segundos por vuelta, el rendimiento de la Ducati “Open” es razonablemente parecido a la Desmosedici de la temporada pasada. Lo que es seguro es que de esta manera la progresión que tiene por delante hace casi seguro que termine la temporada con mejores prestaciones que el prototipo “Factory”.
Sinceramente, me parecería una jugada maestra por parte de Gigi. Lo más inteligente que haría deportivamente Ducati desde el año que ganó el Mundial con Casey y Bridgestone, si es que políticamente se lo pueden permitir.
¿Qué puede pasarle a Ducati como marca?
Bien, la duda estaría en cómo sería contemplada Ducati por parte de Dorna o, incluso, por sus compañeros de la MSMA. Recordemos que ahora hay tensión entre Honda-Yamaha y el organizador del campeonato porque se quiere hacer una electrónica única e igual para todos, cosa que los japoneses no desean para nada e incluso han amenazado con dejar de participar. Si se diese este movimiento, ¿cómo sería tratado Ducati por sus compañeros? ¿Perdería peso en la asociación? ¿Le dejarían formar parte de la asociación?
Imagino que Suzuki y Aprilia, que tienen planes de regresar al campeonato, estarán estudiando el comportamiento y evolución de Ducati con lupa para ver si a ellos también les conviene este formato.
Otra cosa sobre la que también tengo dudas es sobre el dinero, el dinero que ingresa Ducati en su colaboración con la tabaquera Phillip Morris, quien ya empieza a dar signos de cansancio por la no consecución de resultados.
La única cosa que está clara es que Audi, si finalmente se confirmase este fantástico rumor, confía ciegamente en el ingeniero Dall’Igna y le ha dado poderes absolutos.
A veces, los temas de los equipos y las marcas, también son apasionantes. Ojalá se haga realidad.