Este pasado fin de semana hemos asistido a la primera victoria de Suzuki, en esta nueva etapa en el campeonato. Los de la “Big S” lo han conseguido después de 20 meses de trabajo, todo un récord.
Esa victoria ha llegado después de la que se apuntó Ducati pocas fechas antes, en el Gran Premio disputado en Austria. Los de Ducati no han dado con el éxito tan pronto como los de Suzuki, ya que a pesar de no haber abandonado el campeonato se podría decir que han estado ausentes. La última etapa de Preziosi, con Rossi como buque insignia, vivió muchos cambios de dirección en busca de hacer conducible una moto que sólo Stoner supo hacer ir rápida.
Después la infructuosa etapa de Goebmeier, el director técnico impuesto por Audi tras la compra, llegó Dall’Igna y en 2014 se inscribió todas las motos de la marca italiana en la categoría Open, en donde disfrutó de ventajas técnicas para empezar a aparecer por delante, aunque sólo fuese en entrenamientos. Eso permitió que, mientras en Suzuki desarrollaba la moto alejados de la competición, los de Ducati tenían la libertad de desarrollar completamente la moto y comprobar los resultados de forma inmediata. Pero no fue hasta 2015 que pusieron en pista una moto que salió completamente de la cabeza de Dall’Igna.
Eso hace que, en definitiva, los tiempos desde el inicio del desarrollo hasta el éxito para las dos marcas, ha sido aproximadamente el mismo.
¿Quiere decir eso que de Aprilia se puede esperar unos plazos similares hasta llegar a ser competitivos?
Es algo que no se puede contestar con certeza.
Teniendo en cuenta que las inversiones son lo que acerca a los resultados, aunque no los garantice, podemos ver que el “Caso Aprilia” es cuanto menos complejo.
No existe una certeza sobre cuánto invierte cada marca en el desarrollo de sus motos, por lo que no es posible analizar la proyección de los de Noale a través de esta variable. Sin embargo sí que hay una cuestión que evidencia la diferencia de inversión, y no es otra que la capacidad de trabajo que cada fábrica destina a ese desarrollo: los ingenieros.
A lo largo del fin de semana en que Suzuki ha vuelto a lo más alto del podio, hemos recabado las cifras de los trabajadores de cada marca que están dedicados al proyecto. Y hay sorpresas.
Lógicamente las fábricas no muestran sus cartas y dan números aproximados. Estos números de referencia han disminuido respecto de la época en que la electrónica no era la de Dorna, prácticamente se duplicaban los números. Eso hacía que los costes se disparasen y, por lógica, sólo los fabricantes más fuertes tenían opciones de alcanzar la victoria y limitando de facto a una competición entre Honda y Yamaha.
La llegada al vértice por parte de Ducati y Suzuki se ha dado a partir de ese momento en que no se han necesitado inversiones y recursos destinados a la parte electrónica. De esta forma los ingenieros centran su trabajo en la parte mecánica y ciclo de la moto.
Más abajo se encuentra la tabla con el número de trabajadores que en cada fábrica se dedica a pensar y desarrollar los prototipos, y veremos que lo que ha hecho Suzuki tiene un gran valor.
| Marca | Ingenieros |
| Honda | más de 100 |
| Yamaha | unos 100 |
| Ducati | unos 100 |
| Suzuki | unos 40 |
| Aprilia | 7 |
Lo que más salta a la vista no son los más de 100 ingenieros que los de Honda destinan a unas motos que no satisfacen a sus pilotos, a ninguno, sino los menos de diez ingenieros de Aprilia.
Si la diferencia de unos 60 ingenieros entre Suzuki y Ducati hace que lo que han conseguido por el equipo de Davide Brivio sea una hazaña, sitúa en “locura” el intento de Aprilia, ya que afronta el desafío con un número que se podría considerar como ridículo para afrontar tamaña aventura.
Está claro que el talento puede superar adversidades obvias, sin embargo las diferencias al final de carrera entre el mejor piloto de Aprilia y el vencedor no baja en ningún caso de los 30 segundos. De hecho lo más normal es que la distancia esté por encima de los 40 segundos, por lo que no han conseguido evolucionar en absoluto en toda la temporada. Y esa es la parte preocupante, ya que la diferencia con la que Suzuki llegaba a meta en su año de retorno era justamente la mitad del tiempo que entrega Aprilia a día de hoy.
Es cierto que Aprilia ha decidido volver un año antes de lo planificado a la competición, por lo que debería estar en una situación igual a la que están en KTM, con lo que debemos concederles el margen de confianza de que desde hoy a la carrera de Catar 2017 conseguirán reducir 20 segundos. Aunque más que confianza parece que tendremos la esperanza de que lo consigan.
@MotorluNews