Lowes no salió tan bien como Folger, pero el que tuvo un susto enorme fue Lüthi que salvó in extremis una caída por orejas. Corsi se ponía tercero tras Folger y Lowes, pero en la segunda vuelta cayó al perder la rueda delantera.
Esa situación ponía a Morbidelli en posición de podio, que debería discutir con Alex Rins. El de Barcelona parecía haber recuperado las sensaciones que no había conseguido tener en los entrenos, y poco a poco cerró diferencias con Folger. La carrera se ponía con tres pilotos en cabeza para luchar por la carrera.
Así fue en las primeras vueltas, sin embargo los ritmos fueron eliminando la emoción que pudiese existir. Rins, que no tuvo ritmo en los entrenos no pudo seguir a Folger, que apretó el ritmo para alcanzar a Lowes. Se distanció de Morbidelli, poniendo más de 4 segundos que le dió tranquilidad, pero también perdió rápidamente referencia y tiempo con los dos primeros para poder intentar mejorar su tercera plaza.
Sam Lowes, con su imposible regularidad tenía que pelearse de manera diferente en cada curva de cada vuelta, poniendo el único aliciente en la carrera con su pilotaje ya que con su constancia fue estirando los metros tras el colín de su moto. Folger, además, decidió no arriesgar y dejó de perseguir la primera plaza del británico para no ir al límite y arriesgar la segunda posición del podio.
Por detrás, un rosario de caídas permitió a Viñales sumar sus tres primeros puntos, al llegar 13º, y a Salom conseguir estar en el top10 al quedar noveno.
Alex Márquez, quien tenía ritmo para luchar por el podio, tuvo de nuevo mala fortuna y se fue al suelo al caer en la segunda vuelta mientras viajaba en la sexta posición.